Proxy vs VPN: ¿Cuál es la diferencia? Comparación de privacidad, seguridad y precios

Tanto los proxies como las Redes Privadas Virtuales (VPN) pueden ocultar tu dirección IP, dando a tu conexión a Internet una capa de privacidad. Sin embargo, esa es la diferencia entre proxy vs VPN.

Existen diferencias significativas entre los proxies y las VPN en lo que respecta a sus precios y al nivel de privacidad y seguridad que ofrecen. Este artículo comparará los proxies y las VPN y explicará las diferencias clave entre ambos, ayudándote a elegir la mejor solución para tus necesidades.

Proxy vs VPN: Definiciones y principales diferencias

Un servidor proxy actúa como intermediario entre un ordenador y un sitio o aplicación web. Envía peticiones web en nombre del ordenador y devuelve los resultados.

Al haber un intermediario entre el ordenador y la web, la actividad en línea del usuario se asocia a una dirección IP diferente perteneciente a un servidor host remoto. Mientras están conectados a un servidor proxy, las direcciones IP reales de los usuarios quedan ocultas.

Los servidores proxy pueden estar situados en cualquier lugar del mundo. Los usuarios pueden elegir la ubicación del servidor proxy que deseen, configurarlo en una aplicación web específica y conectarse a Internet bajo la IP de esa ubicación.

Hay muchos tipos de proxies. Los tres más utilizados son:

• Proxy HTTP. Se utilizan para ver sitios web de forma anónima o acceder a contenidos con restricciones geográficas.
• Proxy SOCKS. Estos proxies se utilizan para apps y otros fines relacionados con la web fuera del protocolo HTTP o HTTPS, como apps de streaming de vídeo, intercambio P2P o juegos.
• Proxy transparente. También conocidos como proxies en línea, son utilizados por los administradores de red para controlar la actividad en línea, como bloquear el acceso a sitios y páginas web específicos.

Una Red Privada Virtual (VPN) establece un túnel seguro para una conexión a Internet, enmascarando la IP de un ordenador y cifrando los datos intercambiados entre el dispositivo y la web. Para establecer una conexión VPN, primero hay que instalar un cliente VPN en un ordenador. Una vez activado, las solicitudes web enviadas por el ordenador serán encriptadas y enrutadas por el cliente a través del servidor de alojamiento web elegido antes de llegar finalmente al servidor de destino.

Una vez procesada la solicitud, la información se envía de vuelta al ordenador utilizando el mismo proceso de encriptación de datos. En pocas palabras, un servicio VPN protege la dirección IP real de un usuario y hace extremadamente difícil que la gente intercepte sus datos sensibles.

A pesar de algunas similitudes, existen algunas diferencias importantes entre un proxy y una VPN:

• Una VPN se configura a nivel de sistema operativo, mientras que un proxy se configura aplicación por aplicación. Una vez conectado a una VPN, el tráfico de Internet de todas las aplicaciones y procesos en segundo plano se enrutará a través de servidores VPN seguros.
• Todas las VPN cifran los datos, muchos servidores proxy no lo hacen. Los servidores proxy son más propensos al fisgoneo y al robo de datos por parte de terceros malintencionados.
• Las VPN suelen ser más rápidas y estables que los servidores proxy. Las mejores empresas de VPN utilizan servidores de calidad y proporcionan un generoso ancho de banda a sus usuarios, mientras que muchos proxies públicos están en mal estado.
• Las VPN son más fáciles de usar que los proxies. Una VPN es mucho más fácil de configurar: todo lo que tienes que hacer es descargar la aplicación del servicio VPN y conectarte al servidor VPN que elijas. Configurar un proxy, por otro lado, implica introducir la dirección IP y el número de puerto del proxy elegido en los ajustes de red de una aplicación.
• Las VPN son mejores para eludir las restricciones geográficas y acceder a contenidos bloqueados por región en servicios de streaming como Netflix y Hulu. En general, la mayoría de los proxies disponibles no tienen la sofisticada tecnología de desbloqueo que tienen algunas VPN.
• Las VPN de calidad suelen ser caras, mientras que los servidores proxy más utilizados son gratuitos. Un servicio VPN de calidad cuesta unos 5-10 dólares al mes, mientras que muchos proxies HTTP están disponibles públicamente de forma gratuita.

Proxy vs VPN: Comparación de características

Para saber más sobre las diferencias entre los proxies y las VPN, comparemos sus características de forma más detallada.

Rendimiento de la navegación web

Cuando se trata de conexiones rápidas y fiables, las VPN son más rápidas y estables que la mayoría de los servidores proxy.

Los mejores servicios VPN utilizan servidores modernos con un ancho de banda masivo que se distribuye a sus usuarios. Emplean a ingenieros que supervisan y mantienen los servidores para garantizar que estén siempre en las mejores condiciones. Como consecuencia, los usuarios pueden ver vídeos y jugar online con una latencia mínima.

Sin embargo, a veces se producen interrupciones de la conexión con las VPN debido a la sobrecarga de los servidores. Por suerte, cambiar a otro servidor a través de la aplicación o el cliente de la VPN es muy fácil.

Por otro lado, la mayoría de los proxies tienden a ser más impredecibles cuando se trata de la velocidad de conexión. Muchas conexiones de servidores proxy HTTP gratuitos son lentas e inestables; algunas pueden incluso desconectarse sin previo aviso. Existen servidores proxy rápidos, pero muchos de ellos ofrecen una conexión menos segura. Algunos proxies son rápidos sólo porque no están encriptados, así que ten en cuenta este riesgo.

Las VPN también salen ganando cuando se trata de saltarse las restricciones geográficas de sitios web como Netflix o Hulu. Con una VPN activada, los usuarios pueden ver películas o programas de televisión que no están disponibles en su ubicación actual.

Por desgracia, es mucho más difícil encontrar un proxy que pueda evitar los sofisticados bloqueadores proxy. Por ejemplo, la mayoría de los proxies tienen dificultades para desbloquear contenidos extranjeros en China debido al Gran Cortafuegos. Afortunadamente, algunas de las mejores empresas de VPN disponen de tecnología suficiente para eludir estas restricciones.

En general, las VPN ofrecen un mejor rendimiento en la navegación web.

Privacidad

Cuando se trata de privacidad, tanto una VPN como un proxy pueden enmascarar la dirección IP original de un ordenador, permitiéndote navegar por Internet de forma anónima. Pero si te tomas en serio tu privacidad en Internet, hay otros factores importantes que debes tener en cuenta.

Una gran preocupación para muchos usuarios de Internet es el rastreo del proveedor de servicios de Internet (ISP). Tu ISP registra automáticamente tu actividad en Internet, tanto si utilizas el modo incógnito de tu navegador como si no. Esto es lo que se sabe que rastrean los ISP:

• Historial de navegación
• Tiempo de permanencia en cada sitio web
• Tipo de dispositivo utilizado
• Geolocalización
• Búsquedas en línea
• Correos electrónicos

Para mantener tu actividad de navegación oculta a tu proveedor de Internet, utiliza una VPN. Algunos ISP pueden ver que estás conectado a una VPN y que envías datos encriptados a un servidor remoto, pero eso es todo. Tu historial de navegación y otros datos potencialmente sensibles permanecen ocultos.

Con un proxy, tu ISP puede ver que estás usando un proxy y de qué proxy se trata. Dependiendo de si el proxy utiliza encriptación, tu ISP puede seguir rastreando tu actividad online. Si uno de tus objetivos es evitar el rastreo de tu ISP, mantente alejado de los proxies no encriptados.

Sin embargo, los ISP y los sitios web no son las únicas entidades que pueden ver tu actividad online. El propietario de los servidores remotos a los que estás conectado -ya sea una VPN o un servidor proxy- también puede verla. Por eso es esencial elegir una VPN o un servicio proxy de confianza.

Afortunadamente, muchos de los mejores proveedores de VPN tienen una estricta política de no-logs. Esto significa que no registrarán ninguna de sus actividades en línea. Si una agencia gubernamental u otra parte solicita tus datos, un proveedor de VPN con una política de no-logs no podrá entregártelos porque, en primer lugar, nunca los guardó.

Por otro lado, los operadores de servidores proxy gratuitos pueden ver toda tu actividad en línea. Si abres sitios web no HTTPS, cualquier dato que introduzcas será visible para ellos.

Muchos operadores de servidores proxy públicos son anónimos, por lo que es difícil estar seguro de si están monitorizando tu actividad. Evita utilizar un servidor proxy público para actividades sensibles a los datos y elige en su lugar un servicio proxy de confianza.

Seguridad

Un servicio VPN y un proxy público ofrecen niveles de seguridad drásticamente diferentes. Las conexiones VPN están cifradas de extremo a extremo. Los mejores proveedores de VPN utilizan varias tecnologías de cifrado de nivel militar, como el Estándar de Cifrado Avanzado (AES) con claves de 256 bits que son prácticamente imposibles de descifrar.

Cuando se utiliza una VPN, los datos que viajan desde el ordenador de origen hasta el sitio web y viceversa son ilegibles para terceros. Esto evita que posibles atacantes roben tu información sensible, especialmente cuando estás conectado a redes públicas como en una cafetería o un aeropuerto.

Por otro lado, no todos los proxies están encriptados. La mayoría de los proxies HTTP gratuitos no están encriptados, por lo que los datos viajan en forma de texto plano dentro y fuera del servidor del ordenador remoto. Si tus datos, incluidos nombres de usuario y contraseñas, están a la vista de todos, corres el riesgo de que se produzcan filtraciones de datos.

Lo que es aún más preocupante es el hecho de que el 68,5% de los proxies gratuitos en línea realizan actividades sospechosas, como no permitir HTTPS cifrado, modificar JavaScript o inyectar anuncios. Por lo tanto, los proxies HTTP gratuitos deben evitarse por completo o utilizarse con extrema precaución.

En lo que respecta a la seguridad, las VPN también ofrecen un mayor alcance de protección del dispositivo. A diferencia de un proxy, una VPN se configura a nivel del sistema operativo, lo que significa que todo el tráfico web del ordenador -incluidos los procesos en segundo plano- se enrutará a través de la VPN.

Para garantizar una protección constante, algunos proveedores de VPN disponen de una función llamada interruptor de corte (kill switch). Cuando está activada, apaga automáticamente la conexión a Internet si el enrutamiento VPN se detiene por cualquier motivo. Esto evita que tu dirección IP real y tus datos se filtren por accidente.

Por el contrario, un proxy debe configurarse manualmente a nivel de aplicación. Si sólo configuras un proxy en un navegador web, el tráfico saliente de Internet de otras aplicaciones permanecerá bajo tu dirección IP real.

En conclusión, los mejores servicios VPN son más seguros que la mayoría de servidores proxy gratuitos. Sin embargo, también debes tomar otras medidas de seguridad de sitios web para evitar que tu sitio web sea hackeado, o que ULR entre en una lista negra.

Precio

Tanto las VPN como los servidores proxy tienen servicios gratuitos y de pago entre los que elegir, lo que contribuye al coste de mantener una página web.

Cuando los consumidores en general se refieren al uso de un proxy, suelen referirse a la utilización de un servicio proxy gratuito como Hidester o a la configuración manual de un proxy público desde sitios web como Free Proxy List.

Si tu única preocupación es ocultar tu IP y no te preocupa la seguridad de los datos, los servidores proxy gratuitos son lo suficientemente buenos siempre que no los utilices para manejar información sensible.

Mientras tanto, muchos proxies premium están orientados a empresas que realizan recopilación de datos, investigación de mercado y marketing digital. Como consecuencia, suelen ser bastante caros. Por ejemplo, el plan residencial más asequible de Smartproxy cuesta 75 dólares al mes.

Por otro lado, tanto los servicios VPN gratuitos como los premium son muy populares entre los consumidores.

Por término medio, los servicios VPN de calidad cuestan entre 5 y 10 dólares al mes. Con el nivel de protección y el número de funciones que obtienes, pagar por una VPN merece la pena. La mayoría de las empresas de VPN también ofrecen una garantía de devolución del dinero de 30 días, para que puedas solicitar un reembolso si no quedas satisfecho.

Sin embargo, desaconsejamos el uso de servicios VPN gratuitos, que suelen venir en forma de aplicación o extensión del navegador. Por desgracia, se ha demostrado que muchos de ellos realizan seguimientos y contienen malware, lo que anula el propósito de utilizar una VPN en primer lugar.

Si insistes en probar una VPN gratuita, busca empresas de VPN fiables que ofrezcan pruebas gratuitas, como Windscribe, ProtonVPN y Hotspot Shield.

¿Cuál deberías usar, Proxy o VPN?

En general, las VPN son mejores que la mayoría de las opciones proxy. Sin embargo, la mejor opción para cada usuario dependerá de sus necesidades.

Si sólo buscas enmascarar tu dirección IP o evitar el geobloqueo sin intercambiar información sensible, un servidor proxy será suficiente.

Si lo que buscas es una solución integral para ocultar tu IP, proteger información sensible y evitar incluso los geobloqueos más sofisticados, como el Gran Cortafuegos de China, una VPN es sin duda la mejor opción.

¿Puedo utilizar tanto un proxy como una VPN?

Técnicamente sí, pero no es recomendable. Conectarse a un servidor proxy y a una VPN añade un paso extra en tu proceso de conexión web y puede ralentizar significativamente tu conexión a Internet.

Para mantener la privacidad de tu actividad online y una velocidad de conexión estable, utilizar una VPN que enmascare tu dirección IP y encripte tu tráfico web será más que suficiente.

Conclusión

Tanto los servidores proxy como las VPN pueden enmascarar eficazmente tu dirección IP original, pero presentan marcadas diferencias en otros aspectos.

En cuanto al rendimiento, las VPN son más rápidas y estables que los proxies. Algunas VPN también permiten a sus usuarios eludir y desbloquear algunas de las restricciones geográficas más sofisticadas. Por el contrario, los proxies suelen ser muy lentos y raramente sirven para desbloquear contenidos.

Las VPN también son mejores para la seguridad en línea. Establecen un túnel cifrado para todo el tráfico web, impidiendo que terceros husmeen o roben tus datos. La mayoría de los proxies, sin embargo, no cifran tus datos, dejándolos a la vista de los atacantes.

En general, los servicios VPN premium son mejores para proteger tus actividades e identidad online. Un servicio VPN de calidad te costará entre 5 y 10 dólares al mes.

Esperamos que este artículo te haya ayudado a decidir entre un proxy vs VPN. Si tienes alguna pregunta, no dudes en dejarla en la sección de comentarios más abajo.